- Nos encontramos celebrando el domingo Cuarto luego de Pentecostés, y en este domingo dedicado al Señor Jesús, que nos invita a una mayor entrega.
- El mundo sigue con la presión de ver como la Pandemia del Coronavirus sigue haciendo esa pandemia que infunde terror, que deja muerte y desolación, donde nos encontramos con cantidad de personas que están llenas de pánica y muchos gobiernos tienen dinero invertido para competir en ver quien encuentra la vacuna que pueda poner para a este mal que cobra tantas vidas y donde hay varios gobiernos culpables por no haber tomado las medidas necesarias y esas personas deberían de ser enjuicidas y llevadas a la cárcel, porque esos muertos son por culpa de ellos.
- Nos encontramos con el gran rumor de los nuevos asentamientos que quiere hacer Israel, donde se invoca a las Naciones Unidas que conde, pero eso no es el caso, como en otros casos se nombre personal y se manda a las fronteras de esos países y por qué no se manda a reguardar esta frontera donde este país no le importan los derechos de otros, y es sólo porque tienen el apoyo de dos potencias que no les importa lo que diga en mundo entero, porque ellos se imponen a base de la fuerza bestial.
- En los Estados Unidos en medio de la pandemia seguimos en plena campaña electoral, donde no se encuentra un verdadero liderazgo de ambos partidos, que inspiren a la población, pero lo que da tristeza y dolor es ver a un pueblo que siga a un gobierno, que da orden de asesinar, invadir, saquear y que con mentira de la religión los cielos de esos grupos religiosos piensan que es el que reguarda la fe; esto si es muy triste y alienante, porque se ve que esa gente la fe no les a servido para descubrir a Jesucristo liberador, sino una religión que se les ha impuesto, para dominar a los pueblos y sigamos creyendo que es la voluntad de Dios el vivir siendo aplastados por el poderoso.
1) Lectura del Libro del Génesis 22:1-18
- Dios llama a Abraham para probar su fe, si Abraham no es el mismo que abandonó irresponsablemente a Agar con el niño en el desierto, hoy Dios quiere ver la fe de este hombre y de lo que es capaz de hacer por Dios.
- Dios invita a Abraham a sacrificarles su único hijo Isaac, y Abraham que es de una cultura donde se inmolan seres humanos y con la fe que tiene, sabiendo que Dios se lo ha dado y le puede dar más no duda en asumir tal llamada y camina hacia el Monte Moira, llevando a su hijo en un burro y con la leña, para el sacrificio; pero al llegar al cerro, pide a sus sirvientes que lo esperen a bajo y sólo sube él con su hijo y le pone al hijo que lleve la lecha, y mientras van por el camino el hijo va a preguntar a su padre, y dónde está el cordero que vamos a sacrificar? En realidad es muy doloroso y triste para Abraham, pero confía en Dios y él con el cuchillo en mano contesta que Dios va a proveer y el niño cree.
- Isaac es una pre-figuración de Cristo, ya que va en un burro, lleva la lecha, como Cristo subió al burro, fue al Monte Calvario y llevó el leño de la cruz; pero en este caso Isaac, no muere en el sacrificio, porque Dios lo rescata al ver la fe de Abraham que ya ha empuñado el cuchillo para degollar a su hijo en la lecha, y Dios le presenta un cordero, que figura a Cristo el verdadero Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
2) Lectura de la carta de Pablo a los Romanos 6:12-23
- Con frecuencia leemos en los escritos de Pablo que no nos dejemos dominar por el pecado, sino que sea la gracia abundante que dirija nuestras vidas, y hoy nos invita a que seamos nosotros mismos que nos ofrezcamos como ostias vivas a Dios, ya que hemos vuelto a la vida. En verdad no podemos vivir ofreciendo cosas que son fáciles de dar a dios, sino que usted y yo nos ofrezcamos con amor y sacrificio a ese creador que te ha dado a su Hijo para salvarte.
- Si la gracia de Dios nos ha alcanzado, qué mérito tiene que sigamos viviendo en el pecado, hay que volver de la muerte a la vida, y es por eso que no puede usted dejarse dominar por los instintos o cualquier apetito desenfrenado que surja en su vida, sino sabiendo que es llamado a ser santo, por la sangre preciosa del Cordero inmaculado.
- Pablo nos dice con claridad: “El pecado paga un salario, y es la muerte. La vida eterna, en cambio, es el don de Dios en Cristo Jesús nuestro Señor”. Y si usted quiere la vida en Cristo no basta con decir yo creo en Cristo, sino le sigue, no le obedece, no tiene a Dios sobre todas las cosas, no practica el mandamiento del Amor, ni tampoco está proclamando su nombre, y entonces cómo va a alcanzar la salvación, es cierto que es un regalo, porque no se compra, pero usted debe consagrar su vida a Dios, haciendo su voluntad y no lo que usted cree a su manera o conveniencia en un espejismo de religiosidad.
3) Santo evangelio de San Mateo 10:40-42
- Jesús enseña la valorización del ser humano, no por status, sino sabiendo descubrir que en todo ser humano está Cristo presente, no que solo veamos en los grandes jerarcas el rostro de Dios, que la mayoría de las veces no se ve ni la sombra, mientras en los humildes y sencillos, catequistas y predicadores Dios nos habla.
- Cada cristiano debe ser un verdadero imitador de Jesús vivo, que no ha venido a presentarnos un Dios lejano a nosotros, sino el Dios que camina con su pueblo y se ha hecho pueblo y sobre todo cuando nos dice, que hasta un vaso de agua no va a quedar sin recompensa.
- En la vida cotidiana, cuando un pobre es visitado, nos da lo mejor que tiene y se queda algunas veces sin lo que le pertenece, y en la vida del que tiene, en la mayoría de los casas, se le da al pobre lo que ya no usamos, lo que no queremos, lo que ya no nos sirve, y no es así, hay que dar de lo que más nos gusta, hay que ver en el otro el mismo rostro de Dios vivo con el que compartimos y no buscar que nos devuelvan a nosotros el mismo favor.
- Que la gracia de Cristo Jesús, que fue fiel hasta el final, que jamás se reservó nada para sí, de la misma manera todo ser humano que dice creer en Dios habiendo aceptado a Jesucristo, que no busque solo a los suyos, sus amigos, sus familiares, o su grupo religioso, sino que sea, bueno, noble y buscando la perfección como Cristo no ha enseñado. Que pasen un bello fin de semana en Cristo Jesús nuestro único Maestro.
P. Vidal Rivas