REFLEXION DOMINICAL, 9 DE OCTUBRE, 2016

- Dios nuestro Padre, que con amor misericordioso nos da la vida como el don precioso, nos invita vivir en su comunión de amor. 

- Hoy con el Huracán Matthew, nos volvemos a percatar, de lo débiles que somos, de que en verdad la fuerza de la naturaleza tiene un poder destructor y los seres humanos somos limitados y debemos de ser más humildes y dejar de ser arrogantes, para aprender a vivir en comunidad. También debemos de despertar en solidaridad para con los más necesitados.

1) Lectura del Profeta Jeremías 29:1,4-7

 - El profeta Jeremías que ha vivido la vida del Exilio, sabe lo doloroso que es estar desterrado, fuera de su patria, el que no se le valoriza a uno, el que se le ve como parte de un problema sin serlo uno mismo, como sucede hoy en la actualidad con los inmigrantes, que los que son racistas e insensibles con falta de humanismo acusan a los más débiles.

- Jeremías en este texto como profeta que se ha tomado el papel de padre enviando una carta de consuelo de aliento, fortaleza e inspiración a todos los que han vivido la triste historia del destierro el ser exiliado. Todos los que hemos experimentado por la razón que sea, el estar fuera de la tierra que los vio nacer vivimos con nostalgia extrañando el clima la comida, vecinos y familiares; hoy el profeta al entrar a los líderes de Israel hace la vida con esperanza y saber descubrir que Dios nunca nos abandona y que no podemos vivir del pasado quedándonos en la depresión por aquello negativo que vivimos hay que levantarnos de entre los descombros y crear una nueva sociedad plantando y viviendo en familia, en otras palabras viviendo con gozo las situaciones que Dios nos permite vivir. 

2) Lectura de la Segunda Carta a Timoteo 2:8-15

- Esta carta a Timoteo nos instruye a entender que la muerte no es el final que Cristo resucito y murió, de que Jesucristo es linaje de David y si Cristo es nuestro hermano mayor que murió y resucito también nosotros lo debemos anunciar como lo hizo el mismo Pablo. - Pablo en esta carta quiere enseñar a Timoteo que las persecuciones, los sufrimientos y el estar en la cárcel como un criminal; todo por anunciar la palabra de Dios, él lo vive con gozo y es por eso que le repite a Timoteo que él como persona podrá estar encadenado o encarcelado pero la palabra de Dios no. El mismo Pablo hace ver que soporta todo con alegría sabiendo que todo es para honra y gloria y salvación de aquellos que creen en Cristo Jesús.

- San Pablo nos dice literalmente: “Si hemos muerto con Cristo también viviéremos con él; si sufrimos con valor, tendremos parte en su reino; si le negamos, también él nos negara; si no somos fieles, él sigue siendo fiel”. Este es el Cristo del cual Pablo predica él es el mesías, el Enmanuel el Dios con nosotros el Dios que no puede negarse a sí mismo. Por lo tanto si Dios es fiel y permanece fiel que le pasa a usted y a mí que con facilidad renegamos de Dios nos alejamos de él, llenos de envidia y de infidelidad? 

- También Pablo le da el consejo a Timoteo que no sirve de nada las discusiones que perjudican a los otros. Con facilidad muchos de nosotros entramos en discusiones inútiles que no nos sirve más que perjudicar a otros y nos sirve para perjudicar nuestra misma salud; es importante que entendamos que hemos sido creados para vivir en comunión sabiendo que hay un solo Padre de todos y de todas sin distinción de región, lengua o razas. No hay porque vivir en discusiones inútiles que yo soy el mejor y tu estas equivocado es importante la cultura y el respeto y la valorización de los otros sabiendo que en la diversidad esta la riqueza y que Dios nos creó a todos con la misma dignidad y amor. 

3) Lectura del Santo Evangelio de San Lucas 17:11-19

- Cristo que es fiel a la misión que el padre le ha encomendado está consagrado al anuncio de la palabra a liberar el pueblo de toda cárcel de opresión y sanara aquellos que se encuentran enfermos de toda clase de inmundicias. 

- Mientras Jesús va de aldea en aldea hoy que está pasando por la región de Galilea le salen al encuentro diez hombres con Lepra que le gritan: “Jesús, Maestro, ten compasión de nosotros”. Cristo a permitido que estos enfermos de Lepra, que era la enfermedad maligna de aquel tiempo como el Cáncer hoy; con la única diferencia que los leprosos eran excluidos de la sociedad y expulsados del templo de la sociedad. Jesús que es humano sencillo; y compasivo permite que estos hombres se acerquen a él con esperanza y le suplican que tenga compasión de ellos. Cuantos enfermos de Lepra diferentes te gritan a ti pidiendo auxilio y compasión mientras tú te has vuelto siego, sordo y mudo al clamor de tus semejantes. 

- Cristo Jesús cuando escucho el grito de los leprosos y los vio se detuvo. Tubo compasión de ellos y les dijo: “vallan a presentarse a los Sacerdotes “, porque habían sido estos mismos sacerdotes con razón o sin razón de haber excluido y marginado a estas personas hoy les toca a ellos mismos reintegrarlos a la sociedad. El sacerdote tiene mucho poder por lo que determina que eso es aceptado por el pueblo. 

- Los leprosos le creyeron a Jesús sin haber escuchado, sin haber visto que Jesús los había sanado solo con el hecho del haber escuchado que fueran y se presentaran al Sacerdote le creyeron y con esperanza salieron del lugar del escondite para ir a las autoridades religiosas y cumplir con el mando que Jesús hoy les ha mandado. Eran los Sacerdotes los que determinaban quien tenía Lepra y quien no, el que expulsaba y reintegraba de nuevo y en muchos casos por enviado o por equivocación al Sacerdote muchas personas eran marginada y luego se contagiaban.

- Estos diez Leprosos mientras van de camino de nuevo hacia a la ciudad para presentarse a los Sacerdotes se dan cuenta que han sido sanados nueve de ellos no se detienen van corriendo felices a compartir con su familia y la sociedad se cree que ellos son Judíos conocedores de las cosas de Dios pero que en verdad no son agradecidos con Dios; mientras el número diez de los leprosos que hoy está sano, no es Judío sino Samaritano este en cambio en lugar de irse a su ciudad y a casa de su familia regresó al que es fuente de la vida y llegando frente a Jesús se arrodillo postrándose con su cara en la tierra en señal de adoración y agradecimiento a quien hoy lo ha salvado de esa condena que lo tenía la sociedad y la religión excluido.

- Cristo Jesús al ver a este samaritano que ha sido sanado y adorando a Dios en su presencia va a exclamar “¿dónde están los otro nueve que fueron sanados?, como es posible que este extranjero es el único que ha venido a dar gracias a Dios?, esta es la realidad el mundo de hoy donde usted y yo y muchas personas de las que conocemos somos parte de estos nueve leprosos que con facilidad Dios nos sana de muchas enfermedades y nos saca de muchas dificultades; mientras nosotros permanecemos fríos e indiferentes somos seres desagradecidos con Dios y es por eso que en la mayoría de veces son poquitas personas las que colaboran en los templos o en la sociedad siendo comprometidos buenos servidores agradeciendo a Dios; a Dios se le reconoce como a Dios solamente de rodillas y adorándole sabiendo que nosotros somos criaturas y que dependemos de él. Cuando se tiene fe todo es posible, sólo con fe en Dios y Dios te sanara. 

(P. Vidal Rivas)